PERA

La pera es conocida por su capacidad refrescante, una fruta veraniega cuyo poder saciante y dulzura son muy recomendables en diferentes aspectos. De entrada, pese a ese dulzor, no estamos ante una fruta muy calórica, por lo que podemos disfrutarla sin problemas. 

En dietas hipocalóricas y de adelgazamiento es aconsejable, pues sus niveles de fibra y de agua son elevados. Esto hace que la pera sea un alimento jugoso a la par que diurético, además de beneficioso para el tránsito intestinal. 

Ideal para tomar en un zumo de pera bien frío por su valor refrescante, o en un nutritivo puré de pera, goza de versatilidad en su consumo. Sin embargo, sus propiedades no peligran por ello. La facilidad de digestión es una de sus grandes bazas.

LA PERA TIENE UNA LEVE ACCIÓN ASTRINGENTE

Minerales como el potasio están muy presentes en la pera, pero no son los únicos. Podemos encontrar fósforo, calcio e incluso magnesio, creando un combinado de minerales perfecto para nuestro organismo. 

Debido a los bajos niveles que presenta de sodio, la pera es un alimento perfecto para las personas hipertensas. En ello, la pera se apareja a frutas tan dispares como el plátano o incluso los arándanos. 

La pera es una fruta que se puede consumir en concentrados, zumos y purés.